Ella me lleva.
Me dejo llevar. Sonrie.
Me enseña a vivir.
Cambia mi mente, me permite ahogarme en un sollozo para despues sonreir con todos mis dientes.
Ella no lo sabe aun, pero tiene el control de nuestras vidas. En pocas horas fue capaz de enseñarme un nuevo universo. De pedirme lo que sea, para que me ponga en marcha para conseguirlo.
Malena es como un tequila. No podes dejar de beberla entera, hasta el final. No importa cuantas veces. No podes dejarla ahi, esperandote. Es un crimen que no tiene castigo.
Malena es a veces un gato, mimoso y deseoso de caricias. A veces, las menos por suerte, es huraña, pero es que solo estça juntando fuerzas.
Malena es una especie de dios en miniatura, caprichoso y mordaz, pero puede hacerte feliz de un plumazo. Solo con el atardecer de su sonrisa.
Malena no canta el tango, pero que importa, cantare yo para ella.
Mientras siga sonriendo... nada mas importa.
Malena me lleva.
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