<meta name='google-adsense-platform-account' content='ca-host-pub-1556223355139109'/> <meta name='google-adsense-platform-domain' content='blogspot.com'/> <!-- data-ad-client=ca-pub-5977595566885816 --> <!-- --><style type="text/css">@import url(https://www.blogger.com/static/v1/v-css/navbar/3334278262-classic.css); div.b-mobile {display:none;} </style> </head><body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d30108386\x26blogName\x3dA+EQUIS+-+FOTOS+URBANAS\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dBLUE\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://aequis.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_AR\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://aequis.blogspot.com/\x26vt\x3d331012083149762084', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

ACOSTADA O BAILANDO

viernes, julio 07, 2006



"¿Me buscas?
Estoy en el asiento de al lado. Mi hombro está contra el tuyo.
No me encontrarás en las estupas ni en los templos hindúes, ni en sinagogas ni en catedrales, ni en misas ni en “kirtans”, ni al hacer yoga ni al comer solamente verduras.
Cuando realmente me busques, me verás instantáneamente; me encontrarás en la casita más pequeña del tiempo."
(Kabir)


(texto real)

El aire olía a marihuana (o a puro). Ese olor encontró su eco en alguna parte del lado derecho e inferior de mi cerebro. Creo que con su baile atrajo la mirada de muchos hombres, bailaba como una concubina del harén de un palacio musulmán, o como una Gorgona, la hechicera de serpientes de la cabeza. Los hombres anhelan hacer el amor con una hechicera que los devore después de poseerla.
Hay un tipo de escorpión que al terminar de aparearse siempre es devorado por su pareja sexual.
Vi como el aro de plata que le colgaba en el ombligo brillaba bajo la luz; parecía una flor venenosa que florecía en su cuerpo.
Una mano desde atrás abrazó su cintura descubierta.
No sabía quién era, pero tampoco le importaba.

Es que el amor tiene aromas de embrujo, contoneos sensuales y destellos de luna plateada que devoran al hombre que se acerque a las mieles de su diosa hechicera.

A mí también me estaba dando olor a marihuana, pero por mucho que obligué a mis vidriosos ojos a mirar, no logré verte bailar.

Hoy repetiré la experiencia utilizando como baliza la flor venenosa de tu ombligo. A ver qué tal se me da.

Ya te contaré...

O acaso ya lo sepas.

posted by A-X
viernes, julio 07, 2006